La Ochavita, ¿el mejor Bodegón en Mataderos?

Si estás buscando un bodegón en mataderos, o soles poner en Google “bodegón cerca de mi”, donde comer rico, a precios lógicos y sobre todo que te atiendan bien, seguí leyendo que te cuento.

A la hora de salir a comer en familia priorizamos 3 cosas obvias, que la comida sea rica, que la atención sea buena y obviamente que tenga un precio razonable.

Y de acuerdo a los lugares para comer en mataderos, decidimos que lo mejor era ir a un bodegón. Por qué por lo general se come bien y el ambiente es familiar y distendido.

El bodegón del que te voy a contar es La Ochavita, especializado en carnes al horno de barro y pastas, que se encuentra en Pieres y Bragado.

Un bodegón en mataderos crea ambiente con historias

La verdad que al entrar el ambiente ya resulta agradable, colorido y lleno de antigüedades, cada una con su historia, colgadas en las paredes y en el techo.

Podés encontrar desde una boletera de colectivo, carteles vintage, una tabla de lavar ropa que usaban nuestras abuelas y un gran etcétera.

Se nota la dedicación y el buen gusto que le han puesto al restaurante.

Y yo me doy cuenta por qué no me dedique a la decoración de interiores, si quiero poner en casa artefactos vintage me queda como el galpón de herramientas de mi suegro.

Porque ir a comer a la Ochavita no es como comer en casa, es mejor

Está bueno comer en casa es tu lugar, es el momento de compartir con la familia.

Pero siempre te falta algo en la mesa, lo que hace que te levantes más de una vez, pones algo en la tele o algo siempre te distrae.

Todo hace que no estés tan atento a disfrutar deas ese momento de compartir en familia.

En la Ochavita yo sentí que estaba en la casa de un buen amigo.

Sebastián, el tano, ni bien te recibe, ya te das cuenta de que las vas a pasar bien, te recomienda y te asiste en todo. 

Atento a todo lo que necesitas, preguntando si está todo bien, si necesitas algo. Como cuando comes en la casa de un buen amigo.

Y vos solo te dedicas a disfrutar del momento, en un ambiente en el que todos los en el bodegón están en la misma.

Un bodegón en mataderos que sirve comida abundante, fresca y casera como la de la abuela

Nosotros teníamos ganas de probar la provoleta la Oochavita, que ya habíamos oído hablar, y la verdad que superó las expectativas.

Primero que es para compartir y segundo que lo que le ponen arriba es simplemente espectacular, lleva rúcula, aceitunas negras, pimientos cocidos. Una delicia.

Después pedimos costillas de cerdo con salsa barbacoa, al horno de barro, abundante y riquísimo, el toque justo de salsa para que no empalague.

Para nuestra niña salió una hamburguesa completa con panceta y queso incluidos. Con papas fritas gigantes que no dejan que los niños se queden con hambre.

Las bebidas como la gaseosa vienen de litro, nosotros no tomamos vino, pero sí me pedí una cerveza artesanal rubia, por supuesto.

Somos de comer bien, pero tampoco de excedernos, así que postre no pedimos, aunque había algunos postres que tentaban.

A punto de desabrochar el botón del pantalón decidimos pedir la cuenta.

Quedarán para la próxima visita las empanadas de vacío, o alguna carne cocida lentamente.

Los precios en la Ochavita un bodegón en Mataderos

La verdad que son precios lógicos, para ir a comer afuera los tres en ese momento, no pagamos mucho más que cuando vas a un local de comidas rápidas.

Así que los precios están acordes con todo, el lugar, la experiencia y la atención.

Muy recomendable.

Reservar es la cuestión

Sí, siempre tenés que reservar, te recomendaría que no vayas sin reserva.

Para evitar esperas, o que quizás te quedes sin mesa, no cuesta nada llamar al teléfono publicado y reservarte el lugar.

Uno de los mejores restaurantes en el barrio, según mi opinión. Y uno de los mejores bodegones en mataderos, si no el mejor.